El
sistema educativo fracasó con Anita, como con muchos otros. Más tarde, el
sistema laboral tampoco le otorgó lo que prometía. A los cuarenta y cinco años le
diagnosticaron un cáncer de mama. Pero, habida cuenta de tales antecedentes,
confiar en el sistema sanitario era cuando menos una burla.
No es para menos, tal como andan las cosas...
ResponderEliminarAyer leí, junto con otros, este pequeño texto. Ni me acordaba de haberlo escrito. A veces me quedo asombrada y exclamo, aunque sea mentalmente: "¡¿Pero yo he escrito esto?!".
EliminarGracias por leerlo, 000latani000. Besos.