El blog de María Isabel Redondo.
Cita: de estos aires nunca se preocupa uno desde el valle.
Imagen: una niña sentada en un valle. A su espalda está el mar y, más allá, una montaña azul en cuya cima brilla una estrella.

Imagen:La niña se ha puesto de pie, y ahora mira hacia el mar, la cumbre y la estrella.

martes, 23 de noviembre de 2010

De sastres y de lámparas

Para dinamizar cierto foro, alguien propuso anoche el binomio fantástico sastre-lámpara. He aquí las chifladuras que salieron de mi cabecita:

El año pasado por estas fechas, fue a que el sastre le hiciera un traje de luces. Pero, después de la última "corná", lo que lleva es un chándal lleno de "lámparas". Como otros muchos, se dedica a ver obras...


El filamento deseaba un traje de noche que le hiciera brillar, y el sastre lo vistió de cristal.

Por cierto, la lámpara que hay en mi pasillo, cerca de la cocina, se puso tibia de comer chocolate de la nevera a escondidas, y un buen día ya no cupo en su traje de cristal y reventó.


Las lámparas son globos de nieve que un día, de pura tristeza, se convirtieron en lágrimas.
Los copos, airados, se volvieron chispas.
Y el aire de su interior se enrareció hasta hacer imposible la vida.
Pero cada uno de estos mundos inertes se trascendió a sí mismo y llegó a ser semilla de luz.

2 comentarios:

  1. Que tal un sastre que hila la luz de la lampara para hacer el traje de su vida! Bueno se macurrio...

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  2. ¡Guay! Seguro que en algún momento habré escrito algo sobre hilar la luz.
    Lo mejor de estos textos han sido los cariñososo comentarios que he recibido por parte de algunos compañeros. Leer cosas como estas la sube a una a las estrellas:

    Muy bien, Mir.

    Caramba, cuanto te has reprimido en estas fechas. Escribe hija mía, escribe. Dale con ganas.

    Yo que tú seguiría, por cierto. Estás en racha...

    Gracias, chicos.

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