Arpegia la torcaz sobre el jolgorio de los pájaros. Huele a flores de acacia, y el aire malva quiere vestirme de princesa. En la mañana verde y blanca no camino sola: marcha a mi lado la dulce tristeza.
Almuerzo con canciones. A la puesta de sol, me recibe en mi Casa Bajo las Estrellas la caricia de una mínima rosa que aguarda por mí.
Bello en su melancolía.
ResponderEliminarA mi lado también camina la dulce tristeza.
Cada pétalo de esa mínima rosa es el abrazo cariñoso de un amigo.
Desde aquí añado otro pétalo.
Cada uno de los pétalos de esa rosa son abrazos llenos de cariño.
ResponderEliminarBellísimo.
Te mando un pétalo más.